Una de sus funciones más destacadas es la generación de historias interactivas en las que el usuario toma decisiones y participa activamente en pequeñas misiones relacionadas con actividades cotidianas. Estas historias se adaptan dinámicamente en función del estado emocional, las preferencias y el rendimiento de la persona. Para ello, EBO incorpora reconocimiento de voz, síntesis de voz natural, detección de emociones mediante cámara y visión artificial a través de algoritmos como YOLOv7. Todo el sistema está coordinado mediante la arquitectura cognitiva CORTEX, que permite una interacción autónoma, coherente y en tiempo real.